ASTRAGALOMANCIA, CLEROMANCIA Y DADOS
La práctica de "echar la suerte" para recibir un mensaje de algo superior a lo humano es muy antigua, se piensa que aproximadamente desde el 500 a.C. ha sido practicada al rededor del mundo, con diferentes objetos que dan una respuesta aleatoria dentro de unas opciones específicas. Por ejemplo, el dado común con el que se juega parqués, solo puede dar como respuesta un número del 1-6 correspondiente a cada una de sus caras, que son las opciones específicas y determinadas, pero al lanzarlo es que se "echa la suerte" y sale un resultado aleatorio.
La astragalomancia fue la práctica antigua de echar la suerte con pequeños huesos de animal (llamados astragaloi) que tenían diferentes caras, y a cada una de ellas se le hacía unas marcas correspondientes a un significado o símbolo, que podían ser números, letras o conceptos. Según los historiadores, esta forma de predicción empezaba con el consultante lanzando una cantidad específica de huesitos, y luego él mismo o un especialista (sacerdote o sacerdotisa) se encargaba de buscar en los registros lo que había salido de respuesta.
En la ciudad antigua de Kremna (Turquía), donde se practicaba la astragalomancia, hay un monumento al Dios Mercurio, en cuyos laterales están inscritas las posibles 56 respuestas del oráculo al lanzamiento de los huesitos, que era lo que se consultaba. Las respuestas eran presagios de los Dioses, tenían regencias (o sea, cada repuesta correspondía a, o era de un Dios) y advertían sobre posibles obstáculos, o aconsejaban como actuar. Como todos los oráculos, las respuestas no eran directas sino más bien poéticas, y era trabajo del consultante, con ayuda del sacerdote o sacerdotisa, llegar a la interpretación final para usar el consejo adecuadamente.
Esta práctica evolucionó en la Cleromancia, que es la adivinación por medio de dados, y deriva del griego suerte y adivinación. Este tipo de adivinación, al igual la astragalomancia, era asociada a el Dios Mercurio, por lo que se le hacían ofrendas o invocaciones antes de cada consulta, pero la cleromancia era un poco más abierta a la interpretación. En su práctica no habían presagios preestablecidos que guiaran a los sacerdotes y sacerdotisas, sino que cada lado de los objetos era un concepto y ellos tenían que relacionarlos e interpretarlos entre todos.
Hoy en día hay muchas maneras de practicar la Cleromancia, siendo la mas sencilla el uso de los dados comunes y corrientes. Hay varios sitios en internet que proveen el significado de cada uno de los números, pero lo más recomendable para potenciar la intuición y la capacidad mágica de uno mismo es crear los significados individual y personalmente. Esto da completa libertad para los ejercicios interpretativos y para acercarse un poco más a la magia en el día a día.
Ahora te propongo el ejercicio de crear tus propios dados mágicos. Es muy sencillo y bastante divertido, porque tienes la completa libertad de hacer lo que quieras. Traigo 3 plantillas de dados diferentes: uno de 6 caras, otro de 4 caras y el último de 8 caras. En cada una de estas plantillas descargables (1 hoja cada una) hay 2 dados, uno con mi aproximación mágica, para que veas cómo lo hice y también te sirva para usarlo; y otro que está completamente vacío, para que tu crees tus propios significados, los plasmes allí como quieras y lo uses con tranquilidad. Solo es imprimir, llenar los espacios, recortar, armar y ¡usar!
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Este es el dado de 4 caras. La cara que muestra la respuesta es la que queda boca abajo, como base de la pirámide. Mi aproximación mágica fue sobre los 4 elementos, y cada uno dice cómo se debe afrontar una situación dependiendo de su significado.
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Este es el dado de 6 caras, el dado normal. Mi aproximación mágica fue hacerlo responder sí o no, y todos sus intermedios (tal vez sí, tal vez no, sé mas específico y no quiero responder). Es bastante directo, y como pocos oráculos responden sí o no, me parece bastante útil. La verdad es que uso el mío un montón.
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Este es el dado de 8 caras. Mi aproximación mágica fue sobre el bloqueo creativo, por lo que cada cara contiene una acción que me puede ayudar a salir de esa situación. Luego del dado del sí y el no, este es mi favorito, porque me ayuda a encontrar soluciones creativas a mis problemas, porque un bloqueo creativo puede estar en cualquier lado y puede referirse a cualquier tema.
Es en verdad muy sencillo, y no tienes que crear los significados de la nada si no quieres, puedes inspirarte en un tema, o película, o cuento, o conocimiento. Por ejemplo, si sabes de numerología, puedes darle a cada cara el significado de un número. O puedes ponerle de tema el amor, y a cada cara darle un significado con respecto a eso. Puedes hacer lo que quieras, sin miedo a nada y sin pena a nada, y confiar en que lo estás haciendo bien porque no hay reglas ni especificaciones que te limiten.