¿Qué es la magia?
Actualizado: 23 nov 2020
La magia es un concepto bastante amplio y, como el arte, su definición parece variar según a quién se le pregunte. Magia como show, magia como juego, magia como estafa, magia como cualidad del pensamiento ingenuo, magia como sacar palomas de pañuelos, magia como irracionalidad o magia como evento inexplicable.
![](https://static.wixstatic.com/media/7e185d_399951de0a194eb095cd449e5b0db4ca~mv2.jpg/v1/fill/w_980,h_980,al_c,q_85,usm_0.66_1.00_0.01,enc_auto/7e185d_399951de0a194eb095cd449e5b0db4ca~mv2.jpg)
Mucho se ha hablado sobre la magia en las academias. La filosofía la ha definido como un pensamiento primitivo que está antes de la razón, y la psicología la ha puesto como como una facultad mental de la histeria y la disociación de lo real. Pero, espiritualmente hablando, la magia va mucho más allá de todo eso.
El texto de Manuel Delgado Ruiz, llamado La Magia: La realidad encantada, me parece que es un texto que académico que se acerca de forma más honesta y menos pretenciosa a la magia y lo mágico. Él expone la magia como una forma de pensar, en la cual el ser humano se concibe como parte de su entorno y naturaleza, y por lo mismo cree que puede incidir en su funcionamiento, en sus símbolos y significados.
“La magia no está antes de la razón, sino en uno de sus más activos y beligerantes rincones, aquel que expresa lo más radical de la voluntad humana de no romper aquellos lazos ejecutivos que (…) habían hecho del hombre y del universo una sola y única cosa” – Manuel Delgado Ruiz, La Magia (1992)
Así, la magia es un acto creativo, creador de significados, en el cual el individuo busca, mediante objetos simbólicos de su entorno, imágenes o rituales, hacer parte de la naturaleza que lo rodea, de su funcionamiento, sentido y significado, concibiéndose a sí mismo como un ser sintiente, poderoso y capaz; es la facultad del pensamiento humano que lleva al individuo a pensarse a sí mismo como parte de su entorno, y a incidir sobre sus significados y relaciones simbólicas.
Espiritualmente hablando, el pensamiento mágico es estar despiertas, presentes en nuestras vidas, en el momento presente, y ser capaces de re-significar nuestro entorno propio, haciéndonos realmente parte de él y viviéndolo a nuestra manera. Es estar conscientes de nosotros mismos, de las relaciones que tenemos con el mundo externo, de cómo este mundo externo nos afecta internamente, y cuáles motivaciones internas son las que guían nuestro comportamiento externo. Es literalmente estar conscientes de nuestros sentimientos, pensamientos, motivos, rayes, y vivir la realidad en cuanto a eso buscando vivir de la mejor manera.
Hay muchas actividades o rituales mágicos que podemos hacer para incluir cada vez más la magia y el pensamiento mágico a nuestras vidas, para traernos calma, consciencia propia, auto conocimiento, auto entendimiento, y poder sacar el máximo potencial de nuestra existencia actual. Cosas sencillas, introspectivas, que puedes hacer en cualquier momento y tranquilamente, como por ejemplo
Usar la calcomanía que sale en las chocolatinas Jet (Si vives en Colombia), o alguna calcomanía que venga en cualquier caramelo o caja de cereal. Tómala como un mensaje del universo justo para tí en ese momento. Mira la calcomanía, lee lo que dice, y pregúntate qué sentimientos te genera, o cual significado le puedes dar teniendo en cuenta tu entorno y situación emocional en ese momento. No hay respuesta correcta o incorrecta, eres tú hablando contigo misma y nada más.
Estar pendiente de tus emociones. Pregúntate a tí misma por qué tal cosa te generó tal sentimiento, por qué te dio tanta rabia que se te pasara el bus, o por qué te dio tan duro que tu amiga hubiera cancelado el plan que habían hecho. Conversa contigo misma y entiende por qué te sientes como te sientes. Esto te garantiza lo más importante del pensamiento mágico, que es entenderte y conocerte, y, más importante, hace que seas consciente tu sombra o ego para que no sigas permitiendo que guíe tu vida ciegamente, puedas tomar el control de las cosas y aprender a actuar en vez de simplemente reaccionar a lo que la vida pone en tu camino.
Mirar muy bien el piso por el que caminas. No solo el piso, sino todo tu alrededor. Mira las paredes, mira a las personas que tienes al frente en el bus, mira al señor de la tienda, mira los árboles del parque cerca a donde vives. Solemos naturalizar tanto nuestro entorno que no sabemos nada de él. Ésto es porque no estamos presentes en nuestro presente, sino que tenemos tantas cosas en la cabeza que fijarnos en nuestro entorno no es una opción habitual. Pero cuando estás pendiente de él, estás pendiente de tí misma también, y estás pendiente de todas las señales que el universo te pone al frente para guiarte, o darte un regalo lindo.
Tener un diario o cuadernos donde a notar tus sentimientos. Tal vez te suene ridículo eso de anotar tus sentimientos en un cuaderno, o al menos eso me parecía a mí cuando apenas empecé a entrar en el mundo espiritual. Pero es una herramienta increíble, en donde puedes más fácilmente comunicarte contigo misma y entender las cosas que sientes y piensas. Es de las actividades mágicas más sencillas para empezar a entendernos y sacar de nosotros mismas las guías o respuestas que estamos buscando.
Todas estas actividades no son solo fáciles de hacer, sino que son muy poderosas para cultivar un pensamiento mágico y fortalecer nuestra relación con nosotros mismos, que solemos dejar en el olvido. Puedes crear tus propias actividades mágicas, buscando cosas que resuenen contigo y te hagan sentir bien, y eso le agregaría aún más valor mágico.
:)
コメント